El Neuromarketing ya lo conoces, lo haz visto, olido, tocado, escuchado y hasta, muy seguramente, probado. Simplemente que en la cotidianidad no se asocia estrictamente, el campo del marketing sensorial o neuromarketing, con la compra de algún producto o servicio, pero lo más probable, es que se haya utilizado para influir en la decisión de esa misma compra, ¿Cómo funciona? Muy fácil.

Neuromarketing es definido como “la utilización de estímulos y elementos que los consumidores perciben a través de los sentidos” pero esa definición no cuenta el objetivo y responsabilidad de este campo del marketing. Preferimos definir el marketing sensorial como: Una conexión entre el consumidor y la marca a nivel emocional, creando atmosferas determinadas a través de los sentidos.

No es nada nuevo, las empresas entendieron que, con una buena gestión sensorial en su estrategia de marketing, aunque no garantiza más compras, si influencia a que elijan tu marca sobre otras. Básicamente se busca manipular uno o varios de los cinco sentidos para que te inclines por una marca específica.

Y así funciona cada sentido.

El tacto: Favorece la identidad de marca, este sentido ha sido reconocido como influenciador de la conducta de compra del consumidor debido a la interacción física con los productos, puesto que les gusta evaluarlos y recopilan información sobre sus propiedades usando sus manos y dedos, al tocarlos se hace más fácil recordarlos. Por ejemplo, poder tocar una tela o un material es imprescindible a la hora de decidirse por uno u otro producto.

El olfato: Los humanos recordamos el 35% de lo que olemos, es el sentido que genera mayor nivel de recuerdo y de deseo, además, está conectado a las emociones y recuerdos, esa información olfativa puede durar más tiempo en la memoria del consumidor, garantizando altas capacidades de recordación en la marca por parte del cliente. Por ejemplo, el olor a pan tostado y a café es, para muchos, uno de los placeres a la hora de desayunar. Una señal para activarnos, para indicarle a nuestro cerebro que empieza un nuevo día y comenzar con nuestra rutina.

El oído: El sentido de la audición esta también relacionado a las emociones y sentimientos, teniendo en cuenta que la forma en que se experimenta el sonido es individual, gestionado de manera correcta pude incrementar las ventas, de lo contrario las puede afectar negativamente. También se busca que a través de este sentido se pueda recordar una marca, además, la música por excelencia no cuenta con retractores permitiendo implicaciones fundamentales para la gestión de compra y experiencias del consumidor. Por ejemplo, Es importantísimo elegir no solo el tipo de canciones, sino también el volumen con el que queremos que se escuche y tener en cuenta cómo se hace desde cada punto del establecimiento/local.

La vista: La vista es el sentido que más vende, con esto podemos decir que el 90% de la información que recibimos es visual, siendo el sentido responsable de las ventas finales. Los colores son el atributo principal de este sentido, las formas y colores en línea con la imagen de marca busca la manera de emocionar o impactar al consumidor desde la visión. El objetivo es despertar emociones que tengan mucha más fuerza que nuestra parte racional a la hora de escoger un producto o un servicio. Por ejemplo, tu tienda debe ser “agradable” para tus clientes, de forma que la elijan simplemente al pasar por ella.

El gusto: Esta relacionado con los estados emocionales, y al igual que el oído, puede contribuir a cambios de actitud y de percepción de marca, pero para que el producto este en contacto con este sentido, debe pasar por los demás sentidos, por lo tanto, la integración del gusto como sentido genera emociones más ricas y completas, que logran incluso trasladarnos directamente en el tiempo por medio de la memoria. Por ejemplo, muchas tiendas gourmet o tiendas de alimentos triunfan es porque ofrecen muestras totalmente gratuitas de algunos de sus productos.

El valor del consumidor no es el producto que compra, ni la marca, el consumidor esta eligiendo la experiencia derivada y anterior a la compra. Una buena estrategia de neuromarketing o multisensorial (varios sentidos) logra atraer y fidelizar a los clientes potenciales, crear una identidad de marca, hacer más cercana la marca, más humana y por ultimo y que jamás se olvide una experiencia más agradable.